Cortesia: http://www.lanacion.com/ |
El procurador Ordoñez y el ministro de la Defensa Pinzón, cruzados de la democracia, exigen judicializar a la exsenadora Piedad Córdoba por "incitar" a la revocatoria del Congreso de Colombia y "tumbar" hasta el Presidente. Si hubiese dicho: "Solicito con respeto revocar al Congreso y hasta el Presidente si es necesario", tal vez su mensaje no habría pasado de ser otro discurso veintijuliero de la patria macondo-manglariana.
El expresidente Uribe Vélez en cambio, ante la pantalla chica en directo y en reunión con el empresariado nacional, solicitó de manera amable a los congresistas de que antes de ser judicializados y condenados por varios delitos -paramilitarismo, narcotráfico, cohecho, etc, como en efecto ocurrió y ya van casi 100- le aprobaran sus proyectos en favor de los 3 célebres huevos, fundamento de su quehacer político.
Comentan los que leen -al controvertido expresident Uribe Vélez- que en las redes sociales hace permanente apología de varios exservidores públicos que trabajaron con él, durante la larga noche de su mandato gubernamental. Varios de estos ciudadanos se encuentran condenados y en prisión. Otros huyendo y ocultos en el desorden internacional y algunos más enfrentan dilatados procesos judiciales. Eso sí, cada día que pasa, son descubiertos en sus trapisondas y puestos en la picota pública.
A los crímenes en serie -van más de 3 mil-, cometidos por la fuerza pública en el "Régimen de la Seguridad Democrática" contra indefensos jóvenes desempleados de la nación, se les denomina "falsos positivos" y aunque varios de los autores han sido condenados por la justicia, para la mayoría del país, no es una barbaridad, sino "gajes del oficio", en la lucha contra la subversión y el narcotráfico.
El asunto de la semántica es tan crucial en la vida de Colombia, que ahora a los asesinatos se les debe llamar homicidios, tal vez porque suena cercano a omisión= virtud estatal; home=casa, dios=cada cual tiene el suyo=, hemiciclo=teatro, para citar algunos ejemplos. En todo caso, la verdad nacional es que ahora se llama a las minorías étnicas: comunidades indígenas y comunidades afrodescendientes -el país formal-, mientras el país real los excluye y los trata como indios y negros hijos de puta y en el fondo persigue su exterminio o extinción biognética, para continuar en nuestra cara tradición semántica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios expresan la opinión de quien o quienes los escriben por lo tanto es su responsabilidad absoluta; al igual que los artículos del blog tumacopopolo son responsabilidad del autor.