Profamilia organiza una campaña general de esterilización quirúrgica masiva en Tumaco.
El evento que forma parte del tradicional programa de vasectomías, que adelanta la institución desde mucho tiempo atrás, busca continuar reduciendo la tasa de crecimiento demográfico de la región, una de las más altas de Colombia.
En el puerto nariñense, todavía se practica el sexo sin mayor control y preocupación por los probables embarazos.
Un paradigma es que la mujer que resulta preñada en estos encuentros sexuales, si termina preñada tiene que "hacerse cargo de su problema".
En forma significativa, muchos hogares tumaqueños son responsabilidad de las mujeres. De ahí la proliferación de mujeres cabezas de hogar, a los cuales tienen que atender en forma creciente los programas de beneficencia de las instituciones públicas y algunas ONG.
El uso de los preservativos aunque aumentó en los últimos años, de acuerdo con datos de Profamilia, todavía no alcanza consumos altos que incida de manera frontal en la prevención de embarazos no deseados, por lo cual resulta definitivo la estirilización quirúgica masculina.
La campaña busca que varios millares de ciudadanos se sometan voluntariamente a no procrear más y, a seguir divirtiéndose "con su pirinola", sin causar por eso consecuencias nefastas a la sociedad.
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