Presidente Santos cuidado, la Paz en peligro de muerte en el Catatumbo

Reafirmamos nuestra posición en Tumacopopolo: condenamos cualquier acto o situación que derive en contra de la libertad de prensa y en el inalienable derecho  a expresar nuestro pensamiento con plena libertad.

Una democracia real aguanta las opiniones más aberrantes, estúpidas y hasta criminales.

"...Que el Presidente Santos encabece de manera directa la
reaparición sana y salva del Catatumbo a la vida democrática
nacional, junto con los periodistas...."Tumacopopolo.

Por eso, con el respeto que merece el señor Presidente de la República don Juan Manuel Santos, le sugerimos que estudie la posibilidad de viajar al departamento de Norte de Santander para dirigir  de manera personal, como máximo comandante de las Fuerzas Militares de Colombia las acciones que garanticen la pronta aparición y el regreso de la periodista española -nacionalizada en nuestro país- y los otros 2 reporteros nacionales adscritos a la cadena de televisión R.C.N.

Ellos ejercen una oposición sistemática y feroz a los diálogos de Paz en los cuales está empeñada nuestra patria con el respaldo de la mayoría de los colombianos.

Conoce el país que por orden presidencial tanto el comandante del Ejército como el director general de la Policía se encuentran en Santander del Norte y que nuestros soldados y policías desarrollan intensa labor en procura de lograr que lo más pronto aparezcan los comunicadores.

Consideramos que no se debe dar papaya en este caso. En esa región, exactamente en el Catatumbo,  operan también bandas criminales paramilitares brutales y bárbaras que todos los días disparan y emplean las diferentes formas de lucha para abortar el proceso de Paz.

Que el señor Presidente a nombre del Estado encabece de manera directa, la recuperación y la reintegración del Catatumbo, Que esa región reaparezca sana y salva y se reintegre a la vida democrática nacional.

¡Cuidado Señor Presidente! Siguen empeñados los enemigos de la Paz en destruirla al precio que sea. Son aves carroñeras que viven y se alimentan de la guerra casi desde la fundación de la patria.